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Rótulo amarillo ''RESISTENCIA''

El poder de la ficción en contextos de guerra

El poder de la ficción en contextos de guerra

Rótulo amarillo ''RESISTENCIA''

Del 24 de febrero al 16 de abril, el Teatro Valle-Inclán acoge ‘‘Fundamentalmente fantasías para la resistencia’’, la última producción del aclamado director y dramaturgo Alfredo Sanzol. La función accesible está prevista para el 30 y 31 de marzo y contará con subtitulado, audiodescripción y sistemas de ayuda auditiva para personas con discapacidad sensorial.

 

Nos situamos en Kiev, marzo de 2022, primer mes desde la invasión rusa. Patricia, autora y directora de teatro ucraniana, a modo de protesta, decide inventar una serie de personajes que representarán una obra titulada ‘‘Pin, Pan, Putin’’. El local de ensayos de la compañía se convierte en un refugio y finalmente Putin muere, pero eso solo es el inicio del verdadero caos. Así, con un teatro dentro de un teatro, cual matrioshkas, se van construyendo más capas de fantasía. El Director del Centro Dramático Nacional conduce al público desde risas hilarantes, hasta profundas reflexiones sobre la violencia y el absurdo institucional.

‘‘Fundamentalmente fantasías para la resistencia’’ contará con una función accesible el 30 y 31 de marzo a las 20:00 horas, en el Teatro Valle-Inclán, de manera de que las personas con discapacidad visual y auditiva puedan disfrutar de la obra. Hablamos con Alfredo Sanzol sobre su concepción del teatro contemporáneo y la democratización de las prácticas artísticas.

 

«Me gustaría escribir obras de teatro que tuvieran la calidad de las de Shakespeare, Pinter, Moliére, Lope de Vega […] Buenísimas obras de teatro en las que el lenguaje tenga una potencia especial, en las que los personajes sean de no poder creértelos, donde las situaciones sean flipantes, mágicas. […] Toda esa magia del teatro quiero seguir estudiándola e imitándola,  quiero inventar y desarrollar técnicas de escritura que potencien temas e historias que residen en el inconsciente del ser humano. Quiero crear estilos que sustenten nuestros temas y además disfrutar de ponerlos en escena, desarrollar y potenciar la técnica actoral precisa a partir de la cual crear espectáculos impresionantes.»  En estas declaraciones extraídas del artículo ‘’Universo. Alfredo Sanzal sobre su escritura’’ (2019), publicado por Contexto Teatral, hablas de un deseo, de esa meta que quieres alcanzar con tu trabajo teatral. Y al hablar de un deseo, hablamos de una ausencia. ¿Crees que al teatro contemporáneo le cuesta crear obras de tal intensidad y rigurosidad técnica? ¿Sigues manteniendo ese mismo objetivo con tu trabajo?

Realmente sí que se están creando ese tipo de obras. Es cierto que la expresión de un deseo hace referencia a una ausencia, pero en mi caso es más un recordatorio para luchar contra la autocomplacencia. En cada proyecto empiezo desde 0 y tengo que volver a esos objetivos. Cada día aparecen nuevos autores o autoras que me inspiran y que me sirven de ejemplo. Por tanto, este objetivo sigue presente y renovándose. Me gusta ir a ver los espectáculos de los demás, sentirme parte de un colectivo, de una especie de inteligencia creadora colectiva.

 

Recientemente habéis estrenado ‘‘Fundamentalmente fantasías para la resistencia’’, una obra muy arriesgada por el contexto en el que se ubica. ¿Cómo están siendo las primeras recepciones?

Está yendo muy bien, estoy muy contento. Es una obra que tiene mucho riesgo por la fusión del drama con la comedia. También por la temática, muy dolorosa y pegada a la actualidad. El objetivo principal era hacer una reflexión sobre el poder de la ficción en la construcción de la realidad. Otro era usar el humor contra la violencia como un efecto liberador frente al miedo. Y por último, darnos fuerza para seguir resistiendo a la violencia. Creo que los objetivos se están cumpliendo. La violencia de esta guerra no es particular de esta guerra. Está en otras guerras y en la realidad que vivimos en nuestro día a día.

 

En la entrevista para el CDN, donde hablas de tu última obra, pones en relevancia el humor como herramienta de resistencia y de reacción contra la violencia. También la fantasía y la imaginación. ¿De qué manera crees que actúan estos elementos sobre las personas en contextos de vulnerabilidad? ¿Qué tiene la fantasía que nos hace más fuertes?

Reflexionar sobre la realidad a través de la ficción hace que inevitablemente el cuerpo tenga recursos para gestionar esa vulnerabilidad en la realidad. Hay unas conexiones que tienen que ver con la supervivencia. Tanto la ficción como el arte son respuestas al instinto de supervivencia. 

 

El arte puede ser una herramienta de sanación, tanto si lo consumimos como si lo producimos. Pero, a veces, la práctica se concibe como propia de una élite cultural a la que no todos tienen acceso y esto puede conducir a que muchas personas no se atrevan a expresarse a través de códigos artísticos, porque no se ven capaces. ¿Cómo podríamos animar a las personas a que descubran su potencial creador?

No creo que haya ninguna élite cultural. Lo que hay son profesionales de la cultura que hemos dedicado nuestra vida a estudiar y a volvernos profesionales. Pero esto no quiere decir que el arte y la cultura no tengan que formar parte de todo el mundo. Los sistemas educativos y la vida cotidiana están estructurados para restar expresividad artística a todo el mundo, incluido a los profesionales de las artes. A las sociedades les queda pendiente la reivindicación de la expresión artística como una necesidad básica. Y algo que nos hace daño a todos es identificar a los profesionales con una élite. Es como identificar a los albañiles con la élite de la construcción. Es importante reconocer la profesionalidad de cada sector.

 

En tus años como director y como dramaturgo, ¿Qué papel o qué presencia han tenido los conceptos de inclusión y de accesibilidad?

Para mí ha sido muy importante la figura de Inés Enciso, directora artística, gestora cultural y asesora de inclusión y accesibilidad en el Centro Dramático Nacional. Mi relación con estos temas comenzó haciendo un taller dentro del festival ‘‘Una mirada diferente’’ y ha culminado con esta obra, en la que hay dos actores con discapacidad (Pablo Márquez y María Moraleja, de AMÁS Escena) y para mí ha sido un placer y un descubrimiento trabajar con ellos. Es la primera vez que la inclusividad está así de presente en un trabajo mío y ha sido esencial para crear el estilo de la obra. Este trabajo me hace sentir persona, de una manera más amplia o más real, y no se le puede pedir más a un trabajo artístico.

 

Toda la información en: https://teatroaccesible.com/representaciones/fundamentalmente-fantasias-para-la-resistencia-teatro-valle-inclan/

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