La mirada única, inteligente y poética de Manuela Infante da vida al fuego.
Tras el éxito de Estado vegetal, en que Manuela Infante exploraba cómo sienten, piensan y se comunican las plantas y su relación con los humanos, ahora la dramaturga chilena se fija en el fuego, en su omnipresencia y en su potencia devastadora y transformadora.
Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.